El Quesos Puebla vuelve a encontrarse con la derrota por la miníma, en un partido jugado ante el correoso equipo burgales del Juventud del Círculo.
El encuentro empezaba, en su primer cuarto, con un Quesos Puebla muy sólido ofensiva y defensivamente, imponiéndose en estos minutos el ritmo del juego palentino sobre el burgalés. La buena defensa local provocaba malos tiros en los ataques visitantes, que culminaban en excelentes contraataques o transiciones, o si no, con el acierto anotador desde la línea de 6.25. Las rentas en este cuarto llegaron a ser de 16 puntos a favor para los de Juan Carlos Martín.
El segundo cuarto fue un calco del partido jugado la pasada semana ante Las Contiendas.Es decir, las diferencias logradas por el Queso Puebla se esfumaron como un azucarillo, hasta llegar al descanso incluso perdiendo por 1 punto (39-40). Este alarmante bajón palentino tuvo su consecuencia en la reacción burgalesa, basada en su poderío reboteador defensivo y ofensivo, que le permitió encestar con relativa facilidad; y como no, al parón anotador de los locales que elegían erróneamente sus selecciones de tiro y sus lecturas de juego.
En los minutos del tercer cuarto el Quesos Puebla pudo reencontrase con su mejor juego, pudiendo asi llevar el lidrazgo en el marcador manteniendo una mayor concentración que les hizo acabar este parcial ganando por 3 puntos (56-53).
En el cuarto cuarto los burgaleses volvieron a engancharse al partido haciendo gala de su oficio en el campo, aunque los palentinos no daban su brazo a torcer logrando cargar y eliminar por faltas a los postes visitantes. En el último minuto, con un 69-70, los errores por parte de ambos equipo mostraban el nerviosismo reinante en ese momento. A pesar de desperdiciar hasta 4 tiros libres por parte burgalesa, los palentinos no lograron anotar a falta de 4 segundos acabando nuevamente perdiendo un partido con un final apretado.